martes, 15 de mayo de 2012

El hombre que no vió a nadie.

Había una vez un hombre en el Reino de Qi que tenía sed de oro. Una mañana se vistió con elegancia y se fue a la plaza. Apenas llegó al puesto del comerciante en oro, se apoderó de una pieza y se escabulló.
El oficial que lo aprehendió le preguntó:
 - ¿Por qué robo el oro en presencia de tanta gente?
 - Cuando tomé el oro – contestó –, no vi a nadie. No vi más que el oro.

lunes, 14 de mayo de 2012

Mágicos Momentos.

Hoy soñé que me soñaba
Más aun fuera de su sueño
Y despierto recordaba
Esos mágicos momentos

Él me amaba, me besaba
De su alma yo era el dueño
Sus latidos yo robaba
Eran mágicos momentos.

Mientras todo se marchaba
Como ráfaga de viento
Un reloj me despertaba
Destruyendo los cimientos.

Mil secretos el guardaba
Entre lineas de su cuento
Cuando en cama se encontraba
Suspirando sus lamentos.

De la fuerte realidad
Vaga crece la esperanza.
No acompañan la verdad
Sus sutiles alabanzas.

De mi anhelo, mi ansiedad,
De sus gestos, mi esperanza,
Que sin gran asiduidad
Ya no aportan confianza.

(Mágicos momentos)

Lugar.

Donde Soledad no espere
     y Tiempo desee parar.


Donde Dolor canse de padecer
    e Ilusión aprenda a volar.


Donde Miedo huya asustado
    y Muerte tema el final.

Comprender.

Oscura la noche y débil la compañía solo queda el refugio de aquello que nos calma,
lugar donde comprender que mostrar mi alma en todo lugar donde pudiera ser encontrada,
no era, sino, salir a buscar el alma equivocada.

domingo, 13 de mayo de 2012

Predecible.

Una vez oscuro el silencio, no podía verte, no podía oirte.
Te alejabas, lo sentía. Cada paso siguió al anterior de forma condescendiente.
Era predecible.
La imaginación entró entonces, en conflicto con los sentidos, al ritmo que cada parte de mi suplicaba aquel oxigeno cargado del aroma que quedó tras tu despedida.
Y de nuevo todo habia sido predecible.